1.01.2008

Año nuevo...y??


Buenas:
Hace un huevo que no publico ni mi nombre, pero como debo ser la única española que se ha levantado a las 9 de la mañana, aprovecho para dejaros aquí un "feliz año nuevo" a todos. Es frustrante este puto día.
Me explico....
Me he despertado a las 9 de la mañana con un hambre de lobo (sí, soy de las que no se conforman con un café rápido) así que, ilusa de mí, me he puesto 3 jerséis, un gorro de lana y mis botas de 7 leguas dispuesta a encontrar una panadería y una floristería abiertas...JA!
Bajo a la calle y la imagen es desoladora: cajas de petardosvacías, mierda por doquier (vale, también los de la limpieza tienen derecho a comerse las uvas), potas all around, papelinas vacías y abiertas cada 2 pasos y...NI UN SÓLO BAR ABIERTO!!!Diosssss....se habrá cometido una falla en el contínuo espacio-tiempo y me habré despertado en Canadá???
Habrá funcionado el chocar 2 veces los talones para teletransportarme a casa que intenté anoche en medio del atasco, pero con mi sentido de la orientación apunté mal y estoy en Paquistán??
He dormido tanto que en medio ha habido una tercera guerra mundial donde han fenecido todos los taberneros??
No, queridos, no...simplemente es día uno de enero en Madrid y la primera panda de niñatos quinceañeriles borrachos perdidos con la que me cruzo me devuelve a esta cruda realidad. Pero yo, cual vieja que se cuela en el bus, no me achanto y sigo, intrépida, a la busca y captura de una barra de pan que poder tostar y untar con tomate y una floristería donde poder comprar un ramo de margaritas (sí, qué pasa? soy una sentimental). Las calles están vacías de gente, pero el espacio que no ocupan se ha sustituido por las huellas que dejaron anoche: vasos de plástico vacíos, algún cubito de hielo aún sin deshacerse del todo, un olor ácido, serpentinas, confeti y...¡mierda! una barra de pan ahí tirada (tranquilos, no la he cogido).Tras media hora vagando, he tenido que rendirme.
Ahora estoy aquí, con una taza de café bien calentito, una tostada de pan de molde que se ha reblandecido al contacto con el tomate y con una margarita de esas con ventosa para poner en el parabrisas del Seat León....feliz año nuevo, cabrones!

10.26.2007

MÚSICA DE VIERNES



A callar.

Y a escuchar.

Buen fin de semana.

10.25.2007

MemEnigma




Siguiendo una más de las buenas ideas de Germánico, aquí va mi aportación al meme propuesto. A continuación pego sus palabras para que, quien quiera seguir sólo tenga que cortar y pegar:

Atención amigos y no tan amigos de esas cadenas llamadas memes: les insto a que sigan esta. Consiste en poner una imagen, con la que se pretende sugerir algo, y dejar que los que pasen digan lo que a ellos en particular les sugiere. Obligado es que quien cuelga la imagen jamás diga qué quiso decir, de hecho no debe ni comentar, para evitar la tentación de dar pistas. ¿Quién se atreve?. Esto no es nominal. Tómenlo o déjenlo. Adjunten este texto u otro similar. Con las características apuntadas se parecerá mucho más a un meme, y la blogosfera podría llenarse de color y misterio. ¿Hay valor o estoy solo?.
Nota: La foto la he cortado de la página "Images insolites de la semaine"

10.10.2007

CUMPLEAÑOS

Queridos míos:
Con motivo de mi cumpleaños, quedáis todos invitados a degustar virtualmente esta tarta de fresas (frutillas para los argentos) ...podéis respirar tranquilos: no la he cocinado yo!

9.26.2007

Seres: el Gordo



Amiguitos míos:

A falta de anécdotas propias que me apetezca que sean leídas, he decidido empezar una serie que, como ya ha sucedido con anterioridad, seguramente se quedará en el capítulo I, pero que no sea por intentarlo...

TODOS, absolutamente, contamos con un colega en la pandi conocido como "EL Gordo", "Chichas", "Pipo", "Zampabollos", ó un largo etc.,

Mi gordo, vamos a llamarle "El Jarto", se distingue por ser un ansias en todo lo que se ponía a su alcance. Hasta límites insospechados, en serio, así que no creo estar faltando a la verdad ni hiriendo la sensibilidad de nadie, puesto que mi gordo no tenía un problema, tenía una afición: excederse.

Nos metía en unos líos espectaculares porque, como era tan "jarto", no se podía contener en nada.

Por ejemplo, en la época de los 18 a los 23, en la psicopandi con la que yo me movía, ni dios tenía el carnet de conducir más que el Jarto, lo cual no trajo no pocos problemas.

Ejemplo 1:

Pietra: Eh, tíos? Nos vamos a pasar el día a la sierra? (Es lo bueno de ser un desocupado a esa edad, que hacíamos lo que nos daba la gana sin entrar en disquisiciones morales sobre el deber).

Jarto: Qué idea más buena! Yo os llevo, chicos. Eso sí: no tengo pa caldo, así que os toca acoquinar (en mi barrio hablamos así, qué se le va a hacer...ni coles privados, ni hostias!)

Sancho: Ya está el puto gordo sacándonos la pasta para tener gasolina para el resto de la semana, serás cabrón!!

-Ah, mmmh....esto...por cierto, he pillado 25 gramos de petas, 3 corderos para asar, 40 donuts, 25 litros de calimocho y 30 de cerveza...habrá bastante?? Tocamos a 5 talegos per cápita

(Todos a coro): Tu flipas, chaval!! 5 talegos?? Que te den por culo. Toma 5 libras y adminístralas con prudencia.

Allá que nos fuimos, tan contentos a la sierra.

Ya de camino nos la preparó circulando con Ford Orion a 160 por hora y con 7 dentro...por supuesto nos paró la guardia civil.

El contaba con una habilidad peculiar: podía conducir a toda caña y hacerse porros con la mano izquierda, a la vez, así que, cuando nos paró la benemérita íbamos, cuando menos, bastante perjudicados.

Guardia civil: -A ver, carnet de conducir. (Husmeando cuando se abre la ventanilla): salga del coche inmediatamente.

Qué vas fumando, chavalote?

-Quién, yo?(Sacudiéndose al tratar de aguantar la risa)

-No, mi madre. Tu me has visto cara de tonto, chico?

- No, no, no...por dios, es que no se que se ha figurado usted, pero yo fumo Fortuna.

- Mira, por listo me vas a pagar esta multita y da las gracias de que no te lleve conmigo al cuartel.

En fin. Así se las gastaba el Jarto.

En otra ocasión nos fuimos de acampada (alias "acampedo") al Escorial y Lebeche puede dar fe de ésto.

Éramos 11 (10 tíos y moi, que nunca he sido una señorita), dormíamos todos juntos... EL 1ER DÍA. Luego hubo que crear subdivisiones porque el Jarto se acostaba completamente perdido y nos obsequiaba con ronquidos, ruidos guturales de diversa catadura y unos efluvios insoportables...vamos, que acabó durmiendo solo con el pobre Mariano, que se tomó una revancha que habrá de ser contada en otra ocasión.

En esa acampada acabaron echándonos del camping, entre otras cosas porque nuestro bienamado Jarto, cuando se encontraba borracho y solo en la vida pegaba unas voces que casi nos cuesta nuestra integridad física.

En fin, amiguitos, éste es mi gordo, ahora os invito a que expongáis en los comments una comparativa ...Ja!

NOTA: No me vengáis con gilipolleces de que esas no son maneras de hablar de los obesos, que si es un problema, etc., que éste no es un blog políticamente correcto, aquí vale decir las cosas espontáneamente, e incluso insultar (menos a mí, que os borro el comment y me quedo tan pancha).

9.18.2007

Ora et labora










- Hola, buenas tardes, señor albañil. Es usted consciente de que debajo hay una oficina y que con ese ruido infernal lo único que queremos hacer es suicidarnos los unos a los otros??

- Señorita, si no le gusta su trabajo, haberse hecho obispo








....será joputa!

8.01.2007

Una china en mi zapato

* (Esta foto ha sido volcada sin ningún permiso del blog de mi amigo Borch porque emula perfectamente el estado de ánimo que impulsó este post).


Bien, amigos, ha sido un largo periodo de retiro blogístico, pero hoy me come la mugre espiritual y necesito exorcizar demoños (me encanta este palabro).

La pasada Semana Santa, estaba con la parienta en la piltra echando una siestecita de esas de pijama y orinal, que decía mi abuela, cuando un inoportuno timbrazo vino a distorsionar mis ondas alfa (se me quedó la cara como la de nuestro seleccionador, también conocido en círculos bingueros como "El Chuzo de Hortaleza").

Por supuesto, quien abrió la puerta no fuí yo, sino el bueno de C., que con tal de no oirme refunfuñar paga.

Pasó un rato y yo le oía hablar:

-Eh? Cómo? No...no, gracias, de verdad que no.


Pero la puerta no se cerraba.


-No, mira, de verdad, es que no me interesa...sí, venga, va otro día ya...si eso ya eso.


PUM. Al fin, la puerta se cierra tras unos 3 minutos desde la llamada.

- C., tío, pero ¿quién coño era a estas horas? ¿Es que la gente no sabe que en un país civilizado hasta las 6 no se debe llamar a las puertas???
-Pietra, no te sulfures y trata de dormirte, que acabo de tener una de las conversaciones más surrealistas de los últimos tiempos.

(Yo ya, totalmente despejada)

-Ah, sí?? Cuenta, cuenta...
- Pues nada, abro la puerta y me encuentro a 2 chinas jovencitas que me preguntan mi nombre y si me apetece charlar un ratito sobre la biblia...hay que joderse...


(Ojiplática, me quedé, pero mi chico, con el pragmatismo que le caracteriza):


-Venga, vamos a dormir un rato y luego entro en detalles y deja ya de flipar, que tampoco es para tanto!
-Que no es para tanto????? Amos a ver, si yo tengo unos preceptos que sigo a rajatabla, podrían resumirse en : creo en la siesta sobre las demás cosas, venero el sueño a media tarde que me da la vida y...bueno, cómo quieres que no flipe si un par de chinas se aparecen en casa a las 4 de la tarde a hablar de la Biblia?? Es muy bueno, tío. Si vuelven, déjamelas a mí, que tengo una contestación de mi abuelo que estoy deseando poder emular!!!

Total, que pasaron unos días sin saber nada de las chinas, hasta que el domingo alguien llamó a la puerta justo cuando estaba a punto de dar jaque mate a C. (es que en el ajedrez con reloj, arraso), C. se asomó por la mirilla y volvió hablando en susurros:

-Hostia, tía: las chinas

Yo, todo chula:

-Tú déjamelas a mí, que les voy a quitar las ganas de ir evangelizando sin ton ni son a la gente... (no, amigos, es que no aprendo...)

Abro la puerta y me encuentro con 2 chinas con una cara de buena gente que no os hacéis una idea. (Sin entrar en detalles: no sé por qué cojones, pero a mi los orientales me enternecen, me parece que no podrían matar una mosca...Lo sé, no tiene ningún tipo de lógica, es sólo algo instintivo)

-Hola bueno día. Podlíamos hablar con señol C.?

(Tsé, como si fuera su primo...menudas confianzas, pensé yo, mientras C. se escondía en el salón para que no le vieran).

-Cuanto lamento deciros que no está en casa. Puedo ayudaros yo? (se me afilaban los dientes).

Ahí se me fué el guión a tomar por culo. Las miré a la cara de buenas que tenían y supe que iba a ser incapaz de meterlas el corte made in my family que tenía preparado...soy una floja!

-Claro que sí, señora. Le apetecería a usted hablar de la Biblia?
- Pues hombre, así a bocajarro...mas bien no, pero si quereis, pasáos otro día, os invito a un café y hablamos de algo que nos interese a las 3. (Mierdamierdamierda...de verdad las acabo de invitar a café? mmmmh...parece que sí).

Por supuesto, volvieron. Y no una ni dos veces, sino 5. Ante tamaña insistencia, a la 5ª, las invité a pasar y tomar un café.
Una de ellas, Lisa, era la más espabilada y hablaba un castellano medianamente correcto.
-Así que usted se llama pietra, eh? Como plimela mujel.
-Mmmmhh...corrígeme si me equivoco, pero la primera mujer no se llamaba Lilith??
-Noooooo....jijijiji...se llamaba Pietla.
- Ya veo. Mira, casualmente tengo encendido el ordenador, os parece que salgamos de dudas?

Sí, amigos, sí: con 2 cojones las conecté al Google, las metí en una página donde se escribía sobre quién era Lilith y allí las dejé tomando notas (es cierto, os lo prometo).
Total, que así anduvimos unas cuantas visitas más en las que me enteré de que no eran chinas, sino coreanas, y que habían venido a predicar su religión, que es la Iglesia de Dios y se tiraron intentando bautizarme todas y cada una de las visitas, ahí aprendí del arte del toreo a dar capotazos y estrechar mi cintura...ja!

Así pasaron los meses, hasta que me llamaron del sitio donde he empezado a trabajar ahora y me dí cuenta de que iba a necesitar a alguien que me ayudara con la casa, así que no se me ocurrió nada mejor que llamar a una de ellas y preguntarle si conocía a alguien...se ofreció voluntaria y ha estado currando en mi casa 2 meses, con resultados bastante curiosos, dicho sea de paso.
También se han sucedido anécdotas porque, como no la veía, nos comunicábamos a través de notas, del tipo:

-Hola Lisa, por favor, podrías limpiar bien las baldosas de la pared del baño?
- Sí, cómo no....que quiere decir pared?

7.03.2007

Oigo vocessss

Bufff, después de 2 meses de vacaciones bloggeras se me hace raro volver a publicar mis vergüenzas (jejeje).
Bueno, pero allá voy.
Volví de Montmeló y encadené sucesivamente una faringitis y una bronquitis tras las cuales mi voz nunca volverá a ser la misma (sic!).
Como odio a los médicos, no acudí a ellos hasta casi cagarla irremisiblemente.
Para no aburriros resumiré diciendo que mi periplo vírico terminó con un bulto muy sospechoso a la altura de la nuez. Era tan feo y tan gordo que la parienta me mandó al matasanos cagando hostias*
Como a pesar de ser de izquierdas, le tengo mucha fe a la medicina privada (sobre todo por estas fechas en que la sanidad pública te da hora para dentro de 2 meses si estas terminal, vamos) acudí al otorrino una mañana bastante nerviosa.

He de decir que cuando me pongo nerviosa mi lengua adquiere unas habilidades prodigiosas y actúa mucho más deprisa que la neurona más rápida de Germánico, lo cual es mucho decir, eh?
El caso es que estaba el tipo haciéndome un tacto (así lo llaman, pero no seáis cerdos, que me lo estaba haciendo en el cuello) y yo me puse nerviosa y empecé a hablar sin procesar primero y nada menos que le solté:

-Sea sincero, doctor...ya me ha salido la nuez ¿cuánto tardarán en crecerme los huevos?

El tipo se quedó a cuadros, pero yo...yo me quería morir y no podía creer que le hubiera dicho eso!!
Menos mal que le dió la risa y me comentó que ojalá la gente fuera al médico con sentido del humor, pero para mí fue bastante bochornoso!
Lebeche... cuán sabio es tu padre...tu ya sabes por qué lo digo

*nota para Juampa: cagando hostias quiere decir a toda pastilla, rápido, velozmente.

5.09.2007

Ay quien maneja mi barca, quién


Bueno, amiguitos...este finde se puede liar parda.
Me voy a Montmeló a ver las carreras y a hacer el marimacho, que es lo mío. Tiemblo de pensar en que alguna pietrada en tales circunstancias me puede costar cara.
Pampezar, me voy con otros 4 desgraciados en una autocaravana, lo cual promete (estoy poniendo una vela a santa Rita para que mis compañeros de viaje hagan bien la digestión, no les huelan los pies y me dejen fumar porros dentro de la caravana).
Vamos a ver, que ya os contaré. Llevo en el botiquín 200 ibuprofenos, 2 cajas de aerored, unos cascos para insonorizarme del mundo, batería para el móvil y tiritas (sí, qué pasa...nunca se sabe suando te va a salir una ampolla).
También me he metido en la bolsa un diccionario de finlandés (finés?)- español...por si se pone a tiro el Raikkonen, que es un sieso, pero a mi me pone!
Además llevo una barra de pan y tumaca, para pasar desapercibida en el desayuno....

¿se os ocurre que más puede ser necesario?? Espero ansiosa vuestras propuestas.
Buen finde para todos

5.06.2007

Cierre del local



Queridos amigos: estoy pelín quemada, así que me tomo unas vacaciones (espero que no por mucho tiempo, pero no lo sé).

A quienes ya tienen mi correo, seguiremos en contacto, a quienes no... en fin, nos veremos por la red.

Abrazos a todos

4.24.2007

Yo, Pietra


Hoy estuve de visita en casa de Benjamín y leí un post bastante divertido que se llama "No me gusta",
en el que nos invita a hablar de las cosas que no nos gustan del pais en el que vivimos.
Bueno, les recomiendo que lo lean porque está muy bien.
El caso es que me ha traído una anécdota a la memoria de hace bastantes años, cuando era una irredenta chavalita a la que no le achantaba nada: ni la edad del contrincante, ni el lugar, ni los motivos para discutir.
Comentaba yo que, al igual que Carlos, si algo me da por culo profundamente son las señoras que no son tan mayores, que se te intentan colar en cualquier fila: lo mismo en la panadería, que en la oficina de Correos, que en el autobus.
Ahí quería yo llegar.

Cuando iba al instituto, entraba a las 8 de la mañana y tenía que coger un autobús a eso de las 7.30, cuando aún no han puesto ni las calles, vamos.
Como siempre, aquí va una puntualización: yo antes de tomarme 2 cafés al menos, no soy persona, no sé hablar, ladro. La parienta directamente no me dirige la palabra hasta cerciorarse de que he desayunado. Sí, soy insoportable y lo reconozco. Mea culpa. Es lo que hay.
Esto ha sido así desde pequeña, así que imagináos una Pietra adolescente, todo chulita y subidita, a las 7.30 de la mañana esperando el bus en pleno invierno para ir a Historia del Arte...bufff, sólo de acordarme me sale espuma por la boca!!

Bien, pues ahí estaba yo, con el ojo pegado, cuando ¡por fin! llega el bus. Tardó tanto que éramos bastantes esperándolo, pero yo estaba la 2ª, después de otro chico joven.
El caso es que cuando ya estaba dentro, localicé el único asiento libre que quedaba, y hacia allí me dirigí.
Bueno, pues cuando ya tenía las piernas flexionadas, una vieja (bueno, no tanto, unos 60 le calculé yo) más rápida que la pipa de Lucky-Luke...se sentó...la muy hija de puta se sentó, intentando quitarme el sitio que ya tenía yo adjudicado.
¿qué hice yo? ¿sin desayunar y tras esperar el maldito bus casi 20 minutos? Nada, continuar el movimiento natural que había comenzado antes de que la vieja-rapaz me lo intentara quitar.
Sí, señores, me senté ENCIMA de ella.
No podéis figuraros el chocho que armó, la hija de puta. La conversación (a gritos por su parte) vino a ser ésta:

- Pero, ¿qué haces? ¿Te quieres quitar de encima?
- No.
-Que te quites de encima, niñata!
-No. El sitio es mío, yo estaba antes y si usted tiene la flexibilidad necesaria para realizar el escorzo que ha hecho para quitarme el sitio, es que no necesita que la ceda el asiento, así que vamos a ir juntitas, juntitas hasta mi parada...usted verá lo que le conviene.
- Que te quites de encima, niñata de mierda!
- Señora, sin faltar, que es muy temprano y le va a subir la tensión.

A esas alturas de la discusión, el resto de viajeros empezó a intervenir, sorprendentemente, a mi favor:
- Señora, que la chavalita tiene razón, que es usted una aguililla y abusa de que es mayor que ella para quitarle el sitio! ¡Estas viejas, siempre igual! (juro que un tío dijo eso).

Para no eternizarme: la tipa se acabó levantando, me miró con odio y me dejó el asiento. Yo le aguanté encima por lo menos tres paradas..jajaja: la venganza de los jóvenes!!
Sé que esto me pasará factura, pero entre tanto...mmmh...qué gustazo me dí!

4.23.2007

Amanece, que no es poco

Empiezo este post con el título de la sin par película que tanto me ha hecho reir para contar a quí algo que no me ha hecho ni puñetera gracia...y es que yo pongo un circo y me crecen los enanos.
Vais a pensar que siempre me pasa lo mismo, pero no por usual es menos molesto.

Como todos los lunes, después de haber pasado más tiempo del habitual en casa, toca zafarrancho marujil con todo lo que eso conlleva: gatos acojonados por el aspirador bufando a su propia sombra (qué quereis...a mi me estresa un huevo), pelos de los susodichos hasta en el alma (con su pertinente alergia, of course), lavaplatos y, tras éste, lavadora ( que si pongo los 2 a la vez, petan los plomos), bajar a por el uniforme del curro a la lavandería...vamos, de todo menos relajación.
Bien, pues cuando voy a sacar la ropa de la lavadora, ésta ha decidido que centrifugue yo con los piños, porque ella está en huelga, el lavavajillas ha empezado a escupir espuma, pero lo he atajado a tiempo.

Me las prometía yo muy feliz, aunque cansada: ya tenía todo el curro hecho y aún me sobraba tiempo para pegarme una buena ducha, de esas largas y relajantes y preparar la comida en la cocina recién fregada.

Bien, pues aquí viene.
Mira que me tiene dicho mi padre que no ande descalza, que me puedo clavar algo...y yo ni caso.
Iba con el albornoz puesto y la toalla en la cabeza, entro en la cocina y...plas! Hostión de espaldas, frenada por un sillón estratégicamente colocado, que ha evitado que rompiera la crisma.
Pero os preguntaréis, qué, qué coño me ha hecho resbalar...nada, una menudencia, un regalito de mi gato: el muy cabrón rencoroso se marcado un truño fuera de la caja en clara protesta por el ruido del aspirador (es que los gatos son muy vengativos), así que vuelve a ducharte, recoge la mierda de gato (que no hay cosa más repulsiva), vuelve a fregar la cocina y olvídate de la siesta...un día sin siesta es más largo que uno sin pan....aaaaains!!

Pero habrá que decir, como en la peli de Cuerda que amanece, que no es poco!

4.18.2007

Son aquellas pequeñas cosas...

El amigo Juan Pablo me ha enviado esta cadena (meme) en la que propone una vuelta al pasado. Hemos quedado en contar la verdad y la mía (no podía ser de otro modo) es cruda...aunque no hay mal que por bien no venga y de todo aquello también se aprende!! Vamos allá.

Yo hace 10 años: En la Autónoma, estudiando Filosofía. Reponiéndome de un enorme golpe del destino que no pienso contar (porque no tiene gracia, eh? que sabeis que a mi me va la marcha del autoescarnio). De garito en garito, de concierto en concierto y fumandome Jamaica. Living la vida loca, vamos.

Yo hace 5 años: Pasando más frío que en la guerra en Roskilde, Dinamarca. Haciendo una tesina sobre Cioran y flipando con los vikingos. Intentando sobrellevar otro desastre vital (qué le vamos a hacer).

Yo hace 1 año: En el paro, preparando una oposición y un viaje a Londres para la famosa boda de mis desgracias. Terminando un tratamiento médico chungo, pero contenta, con proyectos y ganas de seguir hacia adelante.

Ayer: Martes. Recogí a mis tíos de Zaragoza de camino a Méjico y comí con mi amigo Ignacio en un restaurante griego. Luego a currar, House y a la cama.

Hoy: Bloggear por la mañana con los amigos carlos, Lebeche, Juampa, Mavi y resto de la troupe (gracias chicos, por alegrarme las mañanas). Ahora mismo trabajar y deseando que lleguen las 8.30 para irme a casita.

5 canciones de las que me sé toda la letra: Qué desilusión, de Leño; La ciudad de la furia, de Soda Stereo; Across the universe, de los Beatles; Stairway to heaven, de los Zeppelin; Suspiros de España, popularizada por la Piquer (me sé muchas más, y hasta las sé tocar con la guitarra, eh? ja!).

5 lugares ideales para visitar: Bután (sí, qué pasa?), Polinesia, sur de Argentina, Gabón y Santander.

5 comidas que me gusta comer: Aquí ya se pone fea la cosa porque a mí lo que más me gusta del mundo es comer. Veamos: Cus-cus, el pulpo en todas sus variedades, el cordero al curry que preparo yo (aunque esté mal decirlo), la lubina al horno, el cocido de mi madre...diosssss, ahora voy a dejaros un rato para picar algo!

5 juguetes favoritos: Mis gatos (lamentablemente para ellos), el ajedrez (perdona papá por catalogarlo como juguete), el mus (cuando quieras, Carlos), el parchís (siempre que nos juguemos la pasta) y el risk, aunque pierdo casi siempre (se ve que no soy buena estratega).

Dice el Juampa que el objetivo es conocernos un poco mejor, yo creo que es un ejercicio de memoria! Se lo mando a Kala (aunque, tal vez tarde en leerlo), a X'stian, si le apetece (que no las tengo todas conmigo) y a nadie más porque, para variar, los que yo conozco ya lo han hecho.


4.16.2007

Donde no hay mata, no hay patata

He decidido empezar con esa manchegada que me enseñó mi abuelo y que se usa para decir que de donde no hay, no se puede sacar, que no se le pueden pedir peras al olmo, que...en fin, cuán rico es nuestro refranero! Pues todo eso, amigos, podéis aplicarmelo a mí sin miedo a equivocaros.
Como dije en mi primer post, no me caracterizo por haber tenido demasiada suerte (se ve que cuando nací, las nornas andaban tejiendo algo más importante que mi vida...las hijas de puta!).
Hoy quiero remontarme a uno de esos momentos que en las pelis americanas vienen acompañados de música de violines, el mar está de fondo con una puesta de sol, el chico es rubio y huele bien...en fin, como ustedes habrán adivinado, hablo de...tatachaaan sí: el primer beso (con lengua, eh? que de los anteriores no me acuerdo).

Tras haber leído este post, entenderán la razón de por qué se me quedó grabado a fuego si ni sonó música de violines, de fondo tenía el pico Ocejón, eran las 4 de la tarde, el chico era hindú y olía a...bueno, vale, de eso no me acuerdo. Sin embargo sí que me marcó, sí.
Cuando llegaba el verano, en el pueblo poníamos una hamaca, que colgábamos entre dos árboles para que quedara justo en la sombrita.
Yo llevaba todo el verano tonteando con este chico, que era mayor que yo. A la estúpida edad en que aconteció esta vergonzosa anécdota, eso de ir de mayor molaba un huevo (nunca, nunca me puse relleno en las tetas para aparentar mas edad, eh? eso que conste).
Por fin, él se atrevió a venir a mi casa a media tarde de un mes de agosto tórrido (como vuestras mentes) con la excusa de ver unos vídeos musicales nada menos que de Status Quo (con dos cojones, sí señor!).

Engañé al efebín para que me siguiera al patio, aprovechando que mis padres se habían ido a dar un paseo por el campo. El pobre, que además de ser un niñato, era guiri (extranjero, Juampa) vino detrás de mí confiado en que esa tarde pillaba...con lo que no contaba era con la "pietrada" que le esperaba.

Me puse en plan seductora mientras me dirigía a la hamaca que, estratégicamente yo había cambiado de árbol para que no nos vieran desde la calle. El destino dio su primer aviso cuando me torcí el pie sin llegar a hocicar, pero jodiendo el efecto "femme fatale" que pretendía dar yo al asunto. Reponiendome del susto y ya sin ápice de glamour, cojeando me dirigí a la hamaca más para poner el pie en alto que para ejecutar mi plan conquistador, todo sea dicho.
El chaval al ver hacia donde iba yo, se vino arriba. Me siguió hasta la hamaca de mis pesadillas y entonces...sí amigos, si creíais que ya lo había contado todo os equivocais: aquí va otra de autoescarnio.

El tipo se vino a la hamaca en la que yo ya me había tumbado y desde la que le miraba poniendo ojitos (estaba a punto de llorar por el dolor de tobillo que tenía) y entonces...¡zas! en cuanto se recostó a mi lado y me besó, la hamaca dió una vuelta de 360º expulsándome como si fuera un objeto sideral y casi arrancándole los labios al pobre chaval (ya os dije que soy de dentadura "poderosa", como Ronaldinho).
El tío me miraba con los ojos fuera de sus órbitas mientras se cagaba en todas las putas en hindú...y del labio inferior le salía una gotita de sangre.

Tras esa experiencia, tuve que esperar bastante tiempo para reunir el valor necesario para dejar a algún galán acercarse a mí, creyendo que estaba maldita,¿ no sois de la misma opinión?

4.10.2007

¿Ah, sí? Pues yo más!

Llegando a una edad, nuestros amigos empiezan a casarse...gran putada, sobre todo cuando tienes (como a mi me sucedió hace 2 años) 12 bodas en el mismo año.
Y digo gran putada porque una boda implica (para las chicas): vestido, tacones, maquillaje, peluquería, etc, etc; vamos un pastón.
Si encima úna, lo mas alejada del suelo que ha estado en su vida ha sido a través de las suelas de unas all star, pues vas jodida.
Antes de las bodas me tiro un par de días con mis únicos zapatos de tacón (robados a mi amiga Danvers) poniendo a prueba mis tobillos.
Tampoco me suelo maquillar, así que toca probar y jugártela para no parecer un payaso o un putón verbenero.
En fin, pues de tacones y maquillaje no, pero de fulards controlo un huevo!
Este día en concreto, tenía una boda en Inglaterra (de la que ya os he contado). Quise hacer patria y me dejaron un mantón de manila muy bonito que, a última hora y con las prisas, se me olvidó en Madrid.
Imagináos mi cabreo cuando llegamos al hotel y veo que me va a tocar ir sólo con un corpiño sin mangas y en Inglaterra (podía llover, hacer viento, o cualquier contingencia meteorológica de las que castigan a la Pérfida Albión).
Hice de tripas corazón y rogué que la ceremonia no fuera dentro de una iglesia (porque aquello de llevar los hombros al aire está mal visto). Se escucharon mis plegarias y fué en el patio de un castillo muy bonito del siglo XII, pero aun así, la hermana del novio me dejó un pañuelo para cubrirme un poco los hombros.
Bien, pues íbamos todo maqueados hacia la ceremonia, cuando mi chico pisó un charco con sus zapatos nuevos y yo, como perraca que soy, me empecé a descojonar y a llamarle torpensen. C. , que en el fondo es un bendito, se limitó a mirarme de soslayo y no hacerme puto caso.
Pero, una vez más, el destino no me dejó salir triunfadora.
Estábamos llegando al castillo cuando, en el empedrado de las calles de Lewes, uno de mis tacones se encajonó, provocando que uno de mis tobillos se doblara en un ángulo imposible desbaratando mi "glamour" canillejero.
El hostión de boca que me metí, delante de todos los invitados de la boda fué de aúpa, pero lo peor fué que el pañuelito que me habían prestado fue a caer justo, justo sobre una mierda de perro tamaño ensaimada (aun doy las gracias de que fuera el pañuelo y no mi cara).
El pañuelo para tirarlo y los zapatos se libraron de la quema porque a los 20 días tenía otra boda.
Moraleja: aunque la mona se vista de seda....
Amigos, para que no me sienta tan desgraciada, os invito a que me contéis vuestros momentos de ridículo mas espantoso (os aseguro que es terapéutico)

3.31.2007

Al galope, mis valientes

Hace unos años llegó a mi pueblo una familia gitana, de Córdoba, que nos alegró la adolescencia llenando el campo de caballos que nos dejaba montar gratis para que "estiraran las patas" por el monte cercano.
Al dueño se le conocía por "Pepe-el-de-los-caballos", que en mi pueblo la gente se complica la vida lo justo.
Pues Pepe-el-de-los-caballos resultó ser un hijo de puta redomado, pero eso sí: muy salao.
Se instaló con su familia en un chamizo que se hicieron entre los 6 (padres, hijos y algún tío), rodeó su terreno con una tira de alambre de espino, y...hala, a tomar por culo: habemus domum
Pepe-el-de-los-caballos sólo sabía hacer dos cosas en el mundo: domar caballos y bajarse todo el vino de la ribera, pero con todo, hasta cuando estaba vinagre, era un tipo muy gracioso.
Pues bien, mi madre tuvo la genial idea de mandarnos a mi hermano y a mi, sin conocerlos de nada, a "...echarles un cable: Pobrecillos, son nuevos en el pueblo y ya sabéis que aquí son muy cerrados y nadie se va a ofrecer a ayudarles"..."coño, mamá...baja tú, que menudo morro..." Porfiar con mi madre era una supina pérdida de tiempo, así que nos resignamos y bajamos a ayudar a los nuevos.
Eran increíbles, pero me reservo para un futuro post, que el tema da bastante de sí.
Como premio a nuestra amabilidad, Pepe nos invitó a montar a caballo gratis todos los días que quisiéramos, así también les hacíamos el favor de salir del cercado (a los caballos, eh?)
Los susodichos caballos eran yeguas, todas menos un semental (Rayo) que sólo podíamos montar cuando las yeguas no estuvieran "altas" (en celo, vaya).
Pues un domingo por la mañana, mientras los colegas estaban en misa, a Tito y a mi se nos ocurrió la fantástica idea de pedirle a Pepe un par de monturas. Él nos comentó que sólo podía dejarnos a Rayo y a una yegua (la Cigala) con más años que la Tana, porque las demás estaban en celo o criando, pero en sus propias palabras: "...como la Cigala está tan mayor, ya no cela".
Sus muertos.
Lo echamos a suertes y a mi me tocó "el Rayo" y a Tito "la Cigala". Decidimos ir a dar una vueltecita por el pueblo, aprovechando la salida de misa para fardar un poco...¡madre mía, lo bien que nos hubiéramos quedado en casita!!
La gente se encaminaba ya de misa hacia el bar cuando mi hermano decidió forzar la máquina y me adelantó a un trote ligero. Éste, amigos mío, es el momento catártico del relato:
La Cigala, de buenas a primeras y sin corresponderle a la edad levantó su rabo muy ufanamente ante los hocicos de mi caballo, que, claro, a "la olor" (así lo dicen en la Mancha) de lo que tenía delante se puso de un verraco insultante, desenfundando un metro de rabo, que para sí lo quisiera Rocco Sigfredi.
Os preguntaréis cómo es posible que sepa ese dato si yo iba encima del caballo, no?
Pues, amigos míos, porque a los 2 segundos de que Cigala le mostrara sus mieles, Rayo se puso a rebufo, con las aletas de la nariz abiertas de par en par y, sin cortarse ni una cala, se la calzó...con mi hermano aún montado en la silla...
No queréis imaginar la operación rescate en semejantes circunstancias. Para colmo a mi me dio un ataque de risa que me impedía actuar con eficacia. La gente del pueblo dejó sus vermús y se acercaron...no, queridos, a ayudar, no...a descojonarse (lo juro).
Por fin mi hermano pudo salir y evitar el empalamiento (Rayo no reparaba en especies, el iba a lo que iba) y allí dejamos a los tortolitos...a lo suyo.
Pepe-el-de-los-caballos, lejos de solidarizase con el culo de mi hermano, nos echó una bronca que te cagas por dejar al Rayo: "...apretarse a la Cigala...con lo mayor que es".
Vivir para ver!

3.29.2007

Tu primera comida, chispas

Amigos, he decidido empezar a etiquetar mi blog y esta historia, relacionada con mi chico, va a ser la segunda entrega de "La parienta".
A todos nos pasa que, de primeras, queremos causar una grata impresión a la persona que nos interesa e impactarla con nuestras virtudes, no? Pues yo tengo una virtud que, según mi abuela (sí, la que me daba pan con vino y azúcar de merendar) es infalible para conquistar a un hombre: cocino de puta madre...a veces.
Bien, pues ocurre que hacía poco que conocía a C. y se me ocurrió invitarle a comer (siempre fui más de comidas que de cenas) en mi casa.
Yo pensé: a ver, éste tiene pinta de tener buen saque: que se venga a casa a comer, le dejo flipado con mis aptitudes culinarias, le narcotizo a base de Riojas y fijo que repite!!
Qué osada es la ignorancia!!!
Hacía un par de semanas que había vuelto de Roma de visitar a un familiar y me vine con alguna de las típicas viandas italianas: parmesano auténtico (no el del Mercadona), un panetone, pasta de todos los colores...en fin tipo Paco Martinez Soria cuando viene a Madrid con la gallina bajo el brazo...
Tengo una teoría respecto de los italianos que coincide bastante con las expuestas por Schopenhauer (no pienso entrar en datalles, que bastantes problemas tengo ya) y que incluye desconfiar hasta de cuando les pido la hora...bien, pues trayéndome la comida estaba violando mis principios...y a qué precio.
Vuelvo a aquel día que debía haber sido perfecto en el que yo invito a comer a C.
Para dejarle flipado, decidí tirarme el pisto y decirle que había aprendido la AUTÉNTICA receta del pesto (ya ves tú: machacar hoja de albahaca, pero en fin, queda muy guaysss decirlo) y que le invitaba a un plato.
El pobre se vino a comer.
Yo ya tenía la lata de pesto abierta y vertida en una sartén como si hubiera estado currando en la salsa toda la mañana.
Pues nada, que comimos. A mí me supo un poco raro, pero comestible. A él le encantó (o eso me dijo).
La cosa empezó a ponerse fea a la hora del café.
Desde el otro lado de la mesa yo podía oir las tripas d C. rugir, al tiempo que las mías se desperezaban.
Con la cosa de que, sobre todo al principio, no está fino tirarte media hora en el WC, empezamos a disimular ambos, subiendo el tono de voz para encubrir las protestas de nuestros estómagos. Por supuesto, a la hora o así de comer, nuestras pieles empezaron a adoptar un tono enfermizamente gris y, para alivio mío, a la media hora, el pobre C. puso una excusa y se piró medio corriendo (lo ví por la mirilla).
El resultado del puto pesto fué un cólico de tres pares de cojones y la decisión de no volver a fiarme de las latas romanas.
Por cierto, a C.le convencí de que no había intentado envenenarle y repitió muchas veces y con mejor fin.

3.27.2007

El amor, las mujeres y el Atleti

"No cabe duda: el conocimiento de la muerte, la consideración del sufrimiento y de la miseria de la vida, son los que dan el impulso más fuerte al pensamiento filosófico y a las interpretaciones metafísicas del mundo"
A. Schopenhauer.

Así pues, amigos, yo soy atea por la misma razón que soy del Atleti: no me queda otro remedio. Como en mi vida ha habido una gran ración de sufrimiento y miserias, era inevitable que la reflexión metafísica sobre lo que existe después de la muerte me condujera a comprender que mi consuelo no estaba en el amor o en la religión, sino en el fútbol.
Ya expliqué que la razón por la que me hice del Atleti, lejos de ser una tradición familiar (eran todos del Madrid) fue algo meditado, pero ¿por qué volcar mi impulso filosófico al fútbol?
Eso es lo que voy a explicar aquí hoy.
Ya sabéis que ni estoy bautizada, ni me han educado en ningún tipo de religión más allá de los dogmas de fe que dicta el marxismo (papá, nunca terminaré de comprenderte!!)

A lo que voy, además mis vivencias con las distintas religiones que se practican por estos mundos, han sido, cuando menos, peculiares.
He tenido la suerte de poder vivir en países muy distintos del mío: desde Dinamarca y su estoica forma de asumir su protestantismo, hasta la supersticiosa Islandia, donde los mitos vikingos aún subyacen en la vida cotidiana de su gente, pasando por EEUU, donde me tocó convivir, amigos míos, nada menos que con una familia mormona.

La experiencia mormona.

El verano del 2001, la empresa en que trabajaba en verano cuidando quinceañeros pastosos, decidió mandarme con un pequeño grupo a Maine, EEUU. Yo de Maine lo único que sabía era lo que Stephen King contaba, o sea, nada, pero ¿quién dijo miedo? Para allá que fuí, en un momento personal jodido...creía yo que eso no podía empeorar...¡ja!
Primero dí con una familia, todos ellos ex­-alcohólicos, pero que, con la conversión al “mormonismo” habían reubicado sus caminos.
Como religión no, pero educación me habían enseñado u huevo y además mi innata curiosidad antropológica me empujaba, decidí que era adecuado acompañarlos a misa.
¡En qué puta hora! Las misas mormonas duran ¡3! Horas. Así pude observar cómo los púberes mormones se quedaban sobados de rodillas, con la cabeza apoyada en el banco de delante (palabra de honor que esto es cierto), agotados tras la juerga que, como cualquier adolescente, se habían corrido el sábado.
Bien, pues después de misa me expusieron como a un bicho de feria, en plan exótico:
- Mira, Mary, esta es la española a la que estamos alojando en casa...¿no es “cute”?
*nota: cute, palabra que odio, quiere decir. Rica, mona...y si hay algo que yo no soy, es cute.
El caso es que después de la soporífera misa, había una charla en la que, por supuesto, las mujeres iban por un lado y los hombres por otro. El gran gurú de la orgía era un tejano de, por lo menos 20 arrobas en canal, que no se cansaba de sonreír y mirar al resto de la congregación con ojos de “teperdonolavidapobreignorante”. Esa actitud, aunque yo estaba con las mujeres en otra estancia de la iglesia, acabó por hincharme los cojones.
Así que, ahí me tenéis, en plan listilla acercándome al tipo y con mi cara má inocente, preguntándole:
- Perdone, señor, pero he leído en la biblia mormona, que uds. esperan la 2ª llegada de J.C., y me asombra comprobar que dan por hecho que va a ser en EEUU, sin embargo yo lo que he leído es que nacerá en América. No me lo tome como una impertinencia, pero ¿acaso no podría nacer en Guatemala o Canadá? Según tengo entendido, esos países también pertenecen a América, no?
- Hahaha...buena observación, jovencita, pero es que en la biblia también se especifica que nacerá en “the promise land” y, según me han enseñado a mí, ésta es la tierra prometida...
Ante tal argumento, no pude por menos que reafirmarme en que prefiero poner mi fe en el fútbol: AUPA ATLETI!!

3.26.2007

La botella de anís

Tengo un recuerdo de infancia que se me viene a la cabeza las tardes lluviosas, sobre todo de domingo. Como es un momento del que no me siento especialmente orgullosa, creo que su sitio está aquí, con todos los demás.
Andaba yo por los 5 ó 6 años, era una tarde lluviosa de un domingo invernal. En el salón de mi casa había un armario que me intrigaba bastante, ya que era el único mueble de la casa que tenía llave, la cual, por cierto nunca estaba al alcance ni de mi hermano ni de mi.
Mis padres, de vez en cuando abrían el misterioso armario y sacaban una botella de un líquido que a mí se me antojaba que era agua, por lo transparente que era. Pero no. Claro que no era agua.
Antes de seguir, he de aclarar un punto: en la familia de mi madre, las mujeres han tenido por tradición una, digamos debilidad por la botella... bastante significativa. Especialmente la tía María (mi tía abuela, personaje singular que parece sacado de una zarzuela, ya contaré alguna anécdota de ella) .
Volviendo a aquél lejano domingo, estaban mis padres en la cocina cuando llegaron al famoso armarito, sacaron algo y...¡lo dejaron abierto! Por fin mi curiosidad infantil iba a ser satisfecha!
Abrí sigilosamente (una vocecita interior me decía que aquello no era legal) cogí la famosa botella rellena de "agua" y le pegué un lingotazo de aúpa...
Empecé a toser y me lloraban los ojos, entonces oí que la puerta de la cocina se abría. Como niña que era, mi instinto de supervivencia me hizo volver al sofá ¡pero con la botella en la mano!
Rápidamnte me metí debajo de la manta, botella incluida y me puse a hacer que veía la TV.
Mi padre entró en el salón y vino a jugar conmigo: empezó a hacerme cosquillas (lo cual no ayudaba a que la botella no desparramara el líquido que llevaba dentro). Mi padre notó un olor extraño y me preguntó:
-Pietra, ¿qué escondes bajo la manta?
- Nada, papá. Es que no me apetece jugar. Déjame ver la tele.
- Pietra, dime la verdad.
Entonces abrió la manta y...tacháaaan. Ahí estaba: la botella de anís el Mono escondidita debajo de la manta.
La salida de mi progenitor, siempre original, no se hizo esperar:

- Cristinaaaa: mira, la niña ha salido a tu familia!!

3.23.2007

¡Las Malvinas, argentinas!!

Continuando con el rosario de meteduras de pata antológicas que me han acompañado durante mi corta existencia, hoy, en honor a un tal Leví, procedo a contaros una de las más peligrosas.
Servidora, que es políglota, decidió un verano irse a currar a la Pérfida Albión cuidando de un grupo de mamarrachos quinceañeros cuyos padres no veían el momento de quitarse de encima tamaña responsabilidad.
Los metieron en un programa de intercambio donde yo ejercía de "Group Leader" (cómo me mola lo de ir de jefa) y mi responsabilidad consistía, fundamentalmente, en evitar que se pusieran jartos de güisqui barato (empresa harto difícil por lo descerebrado de su edad)y tuvieran un comportamiento aceptable para las familas inglesas con las que iban a convivir.
Digamos que a mitad del mes, la que suscribe se agarró un pedo de esos que trataba de evitar que se agarraran ellos.
Veréis, cada uno tiene su vocación y la mía, desde mi más tierna infancia, es la de mosca cojonera.
Sí, sí...soy una maestra en sacar de quicio hasta a los caracteras más templados (Lebeche puede dar fe de esto)y esta vez no iba a ser una excepción.
Estabamos en un pueblecito de la costa sur de Inglaterra y unos cuantos monitores, tras acabar nuestra jornada laboral, nos fuimos de celebración al pueblo.
Éramos 2 españolas y 3 ingleses y yo, tras unas cuantas pintas de cerveza tostada me dispuse a tocar un poquito los cojones de los 3 inglesesTras un par de vaciles, me crecí...sí...una vez más: me vine arriba y a voz en grito solté:
- "Las Malvinas, argentinas!!!" En un Español perfecto.
Cerca de nosotros había un señor muy alto, de unos cincuenta y pico, con bigotito muy pulcro, paseando a un cacho de doberman, de esos que si te mira fijamente te cagas.
El pibe, como el que no quiere la cosa se acerca a nuestro grupo y me dice:
- Excuse me, madam, have you said "Las Malvinas"? (disculpe señorita, ha dicho Las Malvinas?)
Yo que lo veo venir, le digo:
- Yes, sir. Do you have any problem with it? (si señor, ¿algún problema?)
Ya sigo en español, aunque la conversación fue en inglés.
- Pues mira, bonita, sí que lo hay, empezando porque el nombre de esas islas es Falklands y yo soy veterano de esa guerra.
Yo, que como he dicho iba un poco perjudicada, no me corté un pelo:
- Me va a disculpar, pero de toda la puta vida se llaman Malvinas y no me cuente su vida, que puede que sea apasionante, pero estoy aquí con unos amigos y realmente no me interesa.
El tipo se me queda mirando fijamente (aun tengo pesadillas).
-Pero tú no eres argentina. Más bien tienes pinta de española, qué pasa, que aún no habéis asumido la pérdida de Cuba? Es esa la razón por la que crees poder reivindicar las Malvinas para Argentina?
- Mire usted, señor, si le tuvieron que insertar una placa metálica en el cerebro tras esa guerra y por eso no entiende que lo que quería decir antes era que me deje usted en paz, se lo digo claramente: déjeme en paz. ¿es que en este país no os enseñan que está muy feo intervenir en conversaciones ajenas?
A todo esto, se fue acercando más gente, Mi amiga española estaba roja, muriéndose de vergüenza y pidiéndome por Dios, que me callara de una vez. Pero yo estaba lanzada.
- El dudoso honor que usted se atribuye conquistando unas islas donde apenas encontraron resistencia y del modo en que lo hicieron, es como para callarse lo de ser veterano, pero además intentar que se les de la razón, ya linda con la estulticia (bueno, dije estupidez, pero me mola más estulticia, si alguien sabe decirlo en ingés, le invito a cenar).
El marine se levantó, le quitó el bozal a su perro y me dijo que iba a dejarlo en su casa y volvía para continuar con nuestra animada charla.

Cuando lo perdimos de vista, los 3 monitores ingleses me miraban y no daban crédito (juro que yo tampoco).
Me dijeron que el tipo era realmente un veterano de las Malvinas y que era conocido por estar loco perdido, que mejor nos piráramos de allí antes de que volviera y me diera una paliza.
Así que, amigos, una vez más, me la tuve que envainar y salir corriendo porque cuando miramos, ya estaba volviendo el puto loco inglés al sitio donde estábamos.
Mientras corría a mi casa le oí gritándome:
- Además, los españoles no sé de qué coño os jactais, ¿no recuerdas la Armada Invencible? Hahahaha

Ahí agaché las orejas y me fuí pa la cama a dormirla. Hice lo que pude


Dedicado a un tal Leví, porque hoy es 23.